El 26 de mayo, en la Comunidad Campesina Santa Rosa de Mancura, del distrito de Pomacanchi- Cusco, se inauguró el primer UrpiWasi , en el marco del proyecto “Rompiendo el silencio de las niñas y adolescentes rurales indígenas de Acomayo, Cusco, Perú”, proyecto ejecutado por la Asociación Kallpa, la cooperación solidaria de la Liga Española de Educación y Cultura Popular y el financiamiento de la Generalitat Valenciana.
Tras varios meses de trabajo, se inauguró el primer UrpiWasi de la región. UrpiWasi en idioma quechua, significa “casa o nido de palomas”, un espacio de protección donde las crías de paloma se fortalecen y se preparan para volar. Este espacio surge como una respuesta a la falta de servicios de prevención y atención ante las situaciones de violencia de género y maltrato infantil en las comunidades. El proyecto tiene como objetivo la apertura de tres UrpiWasi en tres comunidades diferentes de la región de Acomayo.
El objetivo del Urpiwasi es proporcionar a las niñas y adolescentes rurales quechuas de 6 a 18 años un entorno seguro, donde puedan acceder a información para prevenir y responder a las situaciones de violencia que viven en sus comunidades y ampliar sus conocimientos sobre sus derechos sexuales y reproductivos, de manera que disfruten de su infancia y adolescencia sin violencias. Se contaran también con sesiones de refuerzo escolar, servicios de orientación y atención psicológica y en salud.
Estos espacios seguros contarán con el apoyo de mentoras (estudiantes del Instituto Pedagógico), quienes recibirán una formación complementaria sobre educación sexual integral, derechos de la niñez y adolescencia, y estrategias lúdicas para la prevención de violencias en sus comunidades.
El acto de inauguración contó con la presencia y participación del Alcalde de Pomacanchi, presidente y vicepresidente de la comunidad Campesina Santa Rosa de Mancura, representantes de la Policía Nacional, juez de paz de la comunidad, familias, niñas y adolescentes de la comunidad, así como representantes de la Asociación Kallpa y la Liga Española de Educación y cultura popular.
Este logro ha sido posible gracias a los comuneros, quienes, con su compromiso se han organizado para trabajar en la rehabilitación del espacio cedido por la comunidad, así como a las jóvenes mentoras, quienes han recibido sus primeras formaciones para acompañar a las niñas y adolescentes de las comunidades.
En agosto, se prevé la inauguración de dos nuevos UrpiWasi; en la comunidad de Ttio y en Pomacanchi, ampliando así el alcance de esta importante iniciativa.
Esta publicación ha sido realizada con el apoyo financiero de la Generalitat Valenciana. El contenido de la publicación es responsabilidad exclusiva de la Liga Española de Educación y Cultura Popular y no refleja necesariamente la opinión de la Generalitat Valenciana.
