El 21 de marzo fue el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, también el día del Síndrome de Down. Ese mismo día, en la pedanía murciana de La Raya se celebraba un día de convivencia familiar junto al colegio. La bonita concentración de personas y la diversidad cultural propia del vecindario fueron un acicate para que, desde el programa Conjunto de Acciones para favorecer la Interculturalidad (CAI), Programa cofinanciado por la Dirección General de Atención Humanitaria e Inclusión Social de la Inmigración dependiente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y fondos de la Unión Europea, Julia, la técnica de intervención, se acercase a la localidad a compartir con sus vecinas el día especial contra el racismo.
El coloquio fue endulzado con postres caseros y animado con té moruno y café de puchero murciano. Tras la rica degustación, Julia comenzó el encuentro obsequiando a las participantes con un microrrelato infantil, para que compartiesen con sus hijos e hijas y les ayudara en la educación sobre diversidad funcional, diversidad cultural y convivencia. Tras conversar sobre el cuento y su mensaje, se realizó nuestro coloquio antirracista. Julia les proporcionó unas afirmaciones que mostraban curiosos contrastes en las opiniones y creencias y que invitaban a la reflexión sobre la diversidad de puntos de vista, las vivencias particulares ante sucesos compartidos, los contrastes existentes entre diferentes regiones del mundo, diferentes etapas históricas y diferentes tipos de personalidades, gustos, hábitos y costumbres.Las frases fueron extraídas del libro “Patas Arriba. La escuela del mundo al revés”, de Eduardo Galeano y la dinámica dialógica se inspiró en una actividad del “Cuaderno de Actividades Interculturales” (2009) de Cruz Roja.
El coloquio y la reflexión compartida fueron muy interesantes. Hubo expresiones de todo tipo y el debate provocado resultó acalorado y constructivo. Se habló de cultura dominante, de estereotipos culturales, de sesgos en los discursos, de sexismo y machismo, de inclusión, de igualdad de derechos, pero no igualdad homogeneizante, etc.Se comentó que la visión y opinión personal “…depende de donde te hayas criado, de la educación de tus padres y de lo que la vida te trae”; la respuesta más viva fue hacer referencia a la unión perversa del clasismo, el sexismo y el racismo. También destacó un comentario acerca de que “el país donde naces te marca, las costumbres y la cultura de las personas extranjeras lo traen puesto y no podemos quitárselo”; aquí se generó un debate sobre las estrategias de inclusión y las consecuencias para la cultura española, como quitar o no lo que contenga cerdo de la alimentación escolar y los talleres de cocina. Finalmente, se evidenció que “hay mucha diferencia entre las primeras y segundas generaciones en cuanto a integración y buena convivencia”, lo que se concluyó con interesantes afirmaciones(compartidas por varias participantes españolas) como que “hemos aprendido de nuestros hijos e hijas sobre convivencia y tolerancia”, porque “ellos se relacionan libremente, por encima de las diferencias culturales, normalizan todo con naturalidad, no cuestionan las costumbres ni los hatos propios, lo ven normal”.
Gracias a las vecinas participantes en el coloquio y al Amp a“Nuevo Futuro” por favorecer el encuentro. Gracias a todas ellas por el aprendizaje compartido.
